Sr. Presidente el próximo 11 de Noviembre se conmemora un aniversario mas, el 58º (quincuagésimo octavo) del primer acto eleccionario donde las mujeres pudieron votar. Este hecho fue obra de la Ley 13.010, conocida como Ley Evita, por intermedio de la cual se permitía a las mujeres tener el mismo derecho al voto que los hombres, reduciéndose de esta manera un brecha en los derechos de género que, existía desde los inicios de nuestro país, y reproducía la imagen de la mujer relegada a las tareas del hogar, sin voz ni voto en las cuestiones de Estado.
Hoy debemos celebrar una vez más este hecho, porque desde ese momento las mujeres hemos ido tomando día a día más lugar en la política y en la vida pública, siendo partícipes de la historia y de los grandes acontecimientos que han atravesado a nuestro país. Pero mas allá de esta realidad que nació hace más de 60 años, aún las brechas y diferencias de género persisten, son una realidad concreta y diaria con la cual debemos enfrentarnos.
Argentina tiene una diferencia salarial de un 39% entre hombres y mujeres, la mayor de Latinoamérica, según la OIT. Esta cifra es parte del escenario latinoamericano, donde la igualdad entre hombres y mujeres en todas las economías de la región sigue siendo "una utopía", donde las mujeres siguen teniendo grandes dificultades para acceder a cargos directivos. Y son además quienes componen el segmento más amplio de trabajo informal.
Pero los problemas de las mujeres en relación al trabajo no se reducen a cuestiones salariales, sino que además al flagelo de la violencia laboral física y psicológica, expresadas en el acoso sexual y el mobbing por ejemplo.
Por ello desde este lugar llamamos a seguir luchando por nuestros derechos para no solo recordarlos sino también para afianzarlos. Continuando con el camino que abrió la compañera Evita y que aún falta recorrer para llegar a la plena igualdad entre mujeres y hombres.
